Los siete errores que debes evitar si quieres ayudar a una persona deprimida

{simplepopup name=”popupFromLink” popup=”false”}

{/simplepopup}{simplepopup link=”popupFromLink”}iconovideo{/simplepopup}

 

Para empezar, ‘ayudar ’a otro es realmente complicado. Lo mejor que podemos hacer cuando a nuestro alrededor  se encuentra alguien sumergido en un proceso de depresión, es no juzgar y, en todo caso, puesto que la realidad externa es un reflejo de nuestro propio mundo interior, tratar de ver en nosotros lo que observamos que en el otro no nos gusta.

 

Mientras nos ocupamos de nuestro propio proceso, nos puede venir muy bien, tener presente estos siete errores que se suelen cometer a la hora de relacionarse con personas  deprimidas.

 

Esto es, a grandes rasgos, lo que nunca deberíamos hacer:

 

1.- Intentar buscar el motivo de la depresión para consolarle. (Normalmente, no hay un motivo claro y rotundo…el proceso depresivo es complejo).

 

2.- Creer que lo que le sucede es algo irreal y tratar de convencerle de ello. Créanme: la depresión…es muy real para la persona que la padece.

 

3.- Utilizar frases del estilo: “¡Venga, alegra esa cara!”. Esto es tan absurdo como pedirle a alguien que tiene fiebre, que deje de tenerla.

 

4.- Decirle que no está poniendo suficiente de su parte o que salir de ahí es cuestión de voluntad.  Si la persona está en ese estado, es porque evidentemente no tiene capacidad en este momento para salir de él.

 

5.- Enfadarte. Esto, lejos de ayudar, empeora mucho las cosas para la persona que sufre una depresión, puesto que la hace sentir tremendamente culpable, impotente y frustrada.

 

6.- Presionarle para que realice actividades que están por encima de sus capacidades.  Es mejor sugerir sin agobiar.

 

7.- Hacer comentarios desafortunados como: “Tu problema es que no tienes problemas de verdad”; “Cómo se nota que no tienes nada mejor que hacer”; etc.

 

En definitiva, lo más importante es que la persona que está atravesando este doloroso proceso, sienta que le respetamos y que no le juzgamos. Que puede contar con nosotros, aunque seamos tan solo una presencia en silencio que le acompaña. Y recordarle que, por imposible que le parezca, esto que le ocurre ahora…también pasará. Hagámosle saber a esta persona que, aunque no sepamos la manera, confiamos plenamente en su capacidad para superar esta etapa de su vida de la que seguro, se llevará  (y nos llevaremos) un gran aprendizaje.

 

 

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies
Traducir »