Nosotros también hemos sido ‘tocados’ por el espíritu navideño y queremos desearles unas Felices Fiestas, llenas de momentos de alegría, de reencuentros felices y…de oportunidades para compartir, para ser inclusivos y accesibles para los demás, incluso para nosotros mismos.
Decoremos el Árbol de nuestra Vida con brillantes esferas de gratitud y contemplemos el Nacimiento más importante: el nuestro. Porque la Navidad es un momento mágico en el que podemos renacer y ser una versión cada vez más mejorada de nosotros mismos.
Al fin y al cabo, la magia de la Navidad es la magia de las personas…
¡Feliz Navidad!