A partir del próximo año el exoesqueleto, que ya en 2016 se presentó en Tenerife de manos de la Fundación Step by Step, podrá usarse en el Hospital ICOT Ciudad de Telde.
El exoesqueleto robótico está pensado para personas que haya tenido alguna lesión modular, algún daño cerebral, sufran de esclerosis múltiple, tengan el síndrome de Guillain-Barré o una debilidad generalizada debido a otras patologías.
Esta herramietna permite a los pacientes que presentan debilidad en las extremidades inferiores o parálisis levantarse y caminar sobre superficies lisas.
Los motores del exoesqueleto impulsan las articulaciones de la cadera y la rodilla. El movimiento se activa a través de acciones específicas del paciente o mediante un control remoto externo. Su uso debe complementarse con la ayuda de un andador con ruedas delanteras, muletas o un bastón.
Eduardo Martínez, presidente de la Asociación de “La vida sigue en positivo”, sufrió un accidente hace cinco años que le impide caminar. Ha sido uno de los primeros que ha probado esta estructura móvil aquí en Gran Canaria.
Con la ayuda del exoesqueleto ve cómo hay una mejora en su calidad de vida psíquica y física. Eduardo espera que esta tecnología se ponga al servicio de todas las personas en las mejores condiciones posibles de seguridad y de eficacia.