Iván Rivero es inquieto y seguro de sí mismo. Así lo define su madre, Lidia, que asegura que sabe siempre lo que quiere y no quiere hacer. Cuando le preguntas Iván lo tiene claro: le gustan la música, los espectáculos y los cumpleaños. Le encanta todo lo que le aporte movimiento a pesar de que su movilidad es reducida.

 

Iván tuvo una parálisis cerebral cuando nació y tuvo que estar ingresado un año y medio después de nacer. Antes de salir a Lidia le dijeron que su hijo iba a ser un vegetal. Sin embargo, ella y su madre, la abuela de Iván, tenían claro que iba a ser tratado como un niño sin discapacidad, como uno más. Iván hacía todo lo que hacían sus primos: iba a la playa, se montaba en los columpios, se zambullía en el agua… Tanto es así que en 2016 acabó participando en la I Travesía de Piragüismo por la Discapacidad Intelectual. En San Juan de Dios, donde estuvo hasta los 21 años y donde continúa haciendo ejercicios de rehabilitación, aprendió a comunicarse en lengua de signos, el suyo propio y el estándar adaptado a la movilidad de sus manos.

 

A lo largo de la vida la mayor barrera que se han encontrado es la mentalidad de otras personas. “Cuando salíamos a la calle, la gente me preguntaba que qué tenía mi hijo. Yo siempre contestaba que no tenía nada, que iba en silla de ruedas porque no podía caminar pero que estaba sano”, explica Lidia.

Lidia tuvo que comprar una casa adaptada con rampas, puertas anchas y agarraderas para que tanto Iván como ella, que poco a poco va perdiendo movilidad, pudieran hacer una vida normalizada. Y, aunque ahora disponen de muchas más facilidades para moverse con cierta soltura gracias a las adaptaciones que se han realizado en los últimos años, sigue habiendo muchas barreras que romper. Hoy lo que más le preocupa no son las barreras físicas, sino la mentalidad de las otras personas. “Una persona con discapacidad no es una persona menos válida. Como se decía antes: minusválida”, señala, “Simplemente es válida para otras cosas para las que yo no lo soy”.

 

Pica AQUÍ  y podrás ver el vídeo de su historia.

La accesibilidad es la cualidad de una cosa

o de un espacio que se puede usar con facilidad.

Cuando es fácil entrar o usar un sitio,

decimos que es accesible.

 

En Gran Canaria, hay un proyecto

que se llama Ruta por la Accesibilidad.

 

Esta ruta empezó a principios de año.

La ruta tiene lugar en 21 municipios de la isla.

Hasta ahora, hemos hecho esta ruta

en La Aldea de San Nicolás,

en Tejeda y en Artenara.

 

Con esta ruta, queremos que todas las personas

sean conscientes de las oportunidades

que hay en una sociedad accesible e inclusiva,

es decir, en una comunidad

de la que todas las personas formamos parte

y a la que todas podemos acceder sin dificultades.

 

En cada municipio, hacemos un Pleno Municipal Simbólico,

que es una reunión de personas de los municipios.

En este pleno, leemos un manifiesto

de las asociaciones de discapacidad.

Un manifiesto es un texto

en el que un grupo de personas

reclama sus derechos.

 

También hacemos cursos para personas

que trabajan en los Ayuntamientos

y ponencias y otras actividades

para todas las personas de los municipios.

 

Con estas actividades,

queremos acabar con las barreras

que impiden a las personas ejercer sus derechos.

El Real Patronato sobre Discapacidad ha lanzado un año más la convocatoria de los Premios Reina Letizia de ‘Accesibilidad Universal de Municipios’, a fin de poder reconocer y recompensar la inmensa tarea de aquellas administraciones públicas de ámbito local tanto nacionales como de Latinoamérica que mejoren sustancialmente la calidad de vida y la inclusión de las personas con discapacidad de forma transversal y atendiendo a la diversidad.

 

Este premio del que se celebra este año su decimotercera edición con gran éxito de participación en ediciones anteriores, en las que destacaron el excelente nivel de las candidaturas presentadas, tiene como finalidad recompensar a los municipios que han desarrollado una labor continuada, llevada a cabo en un periodo no inferior a cinco años en el campo de l accesibilidad universal de las personas con discapacidad al medio físico, la educación, el ocio, la cultura, el deporte, el transporte, el turismo y las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.

 

Dentro de los criterios de valoración de esta convocatoria se presta especial atención a aquellos proyectos que incluyen acciones destinadas a la realización y desarrollo de programas diseñados a la atención e integración social y laboral de las personas con discapacidad en el campo educativo, ocupacional, de ocio y tiempo libre y cultural. También se valora la realización y desarrollo de actuaciones tendentes a procurar la accesibilidad de las personas con discapacidad a las tecnologías de la información y comunicación; Por otro lado también se valora el desarrollo de actuaciones y campañas tendentes a la accesibilidad de las personas con discapacidad al transporte, al entorno urbano, a la práctica deportiva, a los edificios y servicios oficiales, a la información, a las ofertas culturales y a las actividades de ocio; el desarrollo de actividades dedicadas a sensibilizar y difundir en el Ayuntamiento aspectos relacionados con el ámbito de la discapacidad, así como participación y colaboración en comisiones y actividades del movimiento asociativo de las personas con discapacidad. También se tendrá en cuenta la aplicación de medios técnicos destinados a lograr una autonomía personal de las personas con discapacidad en su entorno familiar, social, educativo y laboral. 

 

El plazo de presentación de candidaturas para poder optar a este galardón finaliza el próximo día 23 de agosto. Para las candidaturas de ámbito nacional se establecen tres categorías: localidades de hasta 10.000 habitantes, de entre 10.001 y 100.000, y por último de más de 100.001, las cuales se repartirán a partes iguales una dotación de 45.000 euros aportada entre el Real Patronato sobre Discapacidad y la Fundación ACS.

 

Por otro lado, para las candidaturas presentadas por alcaldías latinoamericanas se establecen dos categorías: hasta 100.000 habitantes y de 100.001 en adelante, con una dotación que alcanza los 30.000 euros aportada entre el Real Patronato sobre Discapacidad, la Fundación ACS y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID). 

En la pasada edición recibieron este prestigioso galardón los ayuntamientos de Sabiñánigo (Huesca), Ávila, Carreño (Asturias), Terrassa (Barcelona) y a los consistorios latinoamericanos de Freire (Chile) y el Municipio A de la ciudad de Montevideo (Uruguay).

 

Aquí puedes descargarte la publicación en el BOE

Mari Luz reside en el CAMP Reina Sofía llega arrastrando los pies con cierto desparpajo y, aunque aparece cabizbaja hacia donde estoy esperándola para entrevistarla, desde que se sienta a mi lado empieza a hablarme como si me conociera de toda la vida. Me habla de todo lo que hace en el centro. “Me gusta ir a la huerta porque plantamos tomates cherry, coles y acelgas. Y arranco la hierba mala con el sacho. Le ayudo a María a regar también”, me explica. Mari Luz hace de casi todo: canta, pinta, hace puzles, lava, dobla la ropa, ara y recolecta. Le gusta trabajar porque, dice, se siente bien y porque ayuda a sus compañeros. Hace algún tiempo que se ha empezado a involucrar a las personas en las actividades diarias del centro preguntándoles qué les gusta hacer, una medida que se enmarca dentro de una nueva organización de atención centrada en la persona. Margarita Osorio, terapeuta ocupacional en el CAMP Reina Sofía, señala que este cambio ha permitido que las personas dejen de ser usuarios o pacientes que se adaptan a las propuestas del técnico. “Ahora las personas que están en el centro son más partícipes de su propia vida y más responsables de sus actividades lo que ayuda a aumentar su autoestima”, explica. El trabajo en la lavandería es una de las tareas que realiza. “En la lavandería saco la ropa y la meto en las dos secadoras. Cuando se apaga la secadora, doblo la ropa. También doblo las toallas”. Mari Carmen trabaja en la cocina y cuenta que con la ayuda de Mari Luz adelantan el trabajo porque no espera a ver loza sucia, pide agua si falta… “Siempre colabora con nosotros y se siente muy feliz haciéndolo”, dice. Trabajar en el comedor es bueno para ella porque se siente útil y responsable. “Pongo los vasos y las cucharas en la mesa y me siento bien. También ayudo a mis compañeros acostándolos, levantándolos y llevándolos al comedor”, explica Mari Luz. Mari Luz siente especial devoción por Esther Lidia, una compañera del centro. Va a visitarla, le canta y habla de todo con ella porque es la persona a la que más quiere allí, dice. El personal del centro ve cómo Esther Lidia se alegra cada vez que la ve. “Le canto y se ríe conmigo cuando le digo chocochocochocolate… Así me pongo y ¡unas risas que tiene ella, de padre y señor mío!”

 

La Fundación Canaria para las Personas con Sordera, FUNCASOR, nace en 1992 con el objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas con sordera y sus familias. Impulsada por un grupo de padres y madres de personas con discapacidad auditiva se constituye como una entidad sin ánimo de lucro manteniendo un carácter asistencial, cultural, formativo y de servicios.

A lo largo de sus 26 años de vida las cifras de atención prestada por la entidad hablan por sí solas. A través de sus diferentes áreas y servicios ha llegado a contar por miles las personas que se han acercado a la entidad con presencia en diferentes islas del archipiélago. El servicio de Intérpretes de Lengua de signos, o el de información y valoración, empleo, formación, logopedia, o el servicio de atención y apoyo a las familias se suman a la larga lista de servicios coordinados desde la entidad a fin de mejorar la vida de quienes se acercan hasta sus diferentes sedes.

FUNCASOR, con el fin de mejorar día a día la calidad de sus servicios participa en diferentes redes de entidades sociales y empresariales que comparten objetivos comunes.

Junto a Más Fácil, el servicio de lectura fácil de Plena Inclusión Canarias y la colaboración de la Biblioteca Insular de Gran Canaria unen sus esfuerzos para llevar a cabo la actividad interpretada en Lengua de signos “La ciudad de Galdós” una iniciativa que cuenta con el apoyo del Pacto Insular por la Lectura y la Escritura en Gran Canaria (Cabildo de Gran Canaria).

Las personas que participaron en esta actividad inclusiva y accesible compartieron un espacio de la Biblioteca Insular de Gran Canaria en el que se acercaron a la figura de Benito Pérez Galdós y su recorrido biográfico por Las Palmas de Gran Canaria. Para ello, llevaron a cabo una lectura comentada de varios capítulos del libro Descubre y colorea la ciudad de Galdós en Lectura Fácil. Este libro, editado por Canarias eBook en octubre de 2017, es una de las primeras publicaciones del servicio Más Fácil. Con la ayuda de imágenes y varios elementos paratextuales, este volumen presenta catorce lugares emblemáticos de Las Palmas de Gran Canaria (el barrio de Triana, la calle del Cano, la Catedral de Santa Ana, entre otros) y una concisa contextualización histórica de la ciudad de finales del siglo XIX y principios del siglo XX.

El equipo de intérpretes de lengua de signos de FUNCASOR acompañaron a los participantes de esta actividad en la que además de la lectura comentada, se realizó una aproximación breve a algunas de las obras principales del ilustre escritor canario (Fortunata y Jacinta, Los episodios nacionales) y a varios aspectos clave de su vida familiar y literaria.

Al finalizar la actividad las personas que asistieron valoraron positivamente la realización de actividades inclusivas que acercan la cultura a todas las personas. FUNCASOR por su parte continuará dinamizando acciones que contribuyan a la eliminación de las barreras que resultan de la desigualdad en el acceso a la cultura, educación, el empleo y los servicios y que profundizan en las dificultades con las que las personas con discapacidad tienen que convivir en su día a día.

Participar en una de las pruebas deportivas más importante de Gran Canaria, poder respirar el aire en lo más alto de la isla o sentir la energía de nuestros antepasados en Risco Caído o en el Roque Nublo… Así es como la asociación Senderos Sin Barreras aporta su granito de arena para hacer realidad los sueños y los retos de muchas personas con discapacidad.

Lucas Rodríguez es un apasionado de la naturaleza. Además es gerente en Plántate, un Centro Especial de Empleo que lleva catorce años haciendo trabajos forestales y que integra laboralmente a personas con diversidad funcional, y cofundador de la asociación. Entre los trabajos que realizaban en el centro especial de empleo estaban las restauraciones de algunos senderos de la isla de Gran Canaria. Entonces se dio cuenta de que tenía que haber alguna forma de que las personas con discapacidad también pudieran hacer senderismo. Eso lo llevó a presentar el proyecto “Senderos sin barreras”, que fue financiado por AIDER y en el que han colaborado el Cabildo de Gran Canaria o el Ayuntamiento de San Bartolomé.

Gracias a las sillas Jöellete y a Senderos Sin Barreras, muchas personas han podido llegar a lugares que antes se presentaban como espacios totalmente inaccesibles y han podido participar en diferentes pruebas deportivas como, por ejemplo, en la Transgrancanaria. El año pasado lograron subir al Teide, en Tenerife, una actividad conjunta con Itinerario Ágeda e In Córpore Sano de El Hierro.

“En estos 8 años al frente del  proyecto de Senderos sin Barreras, he experimentado muchas sensaciones, en su gran mayoría positivas. He compartido y disfrutado en compañía de personas maravillosa experiencias de superación donde el equipo se ha transformado en unidad para lograr las metas propuestas”, explica Lucas.

El objetivo principal de la asociación es que las personas que tienen movilidad reducida puedan desarrollar actividades al aire libre en condiciones de igualdad.

Silla Joëlette

La Joëlette es una silla diseñada para el desplazamiento de personas con discapacidad física. Dispone de dos un sillón que reposa sobre una rueda (tipo motocicleta) y de 4 barras (dos delanteros y dos traseros). Tiene patas para estabilizar la silla en los períodos de descanso. Son precisos dos o tres personas que actúan de pilotos. Es aconsejable que los asistentes tengan formación específica de la silla antes de su uso.

“Todas las personas pueden usar la Jöellet, pero no todas pueden hacer el mismo tipo de ruta. Por eso proponemos rutas de diferentes niveles para adaptarnos a las necesidades de cada persona. Noes lo mismo el tiempo que tardas en hacer una travesía larga que un recorrido corto”, señala Lucas.

En la actualidad un gran número de personas no puede acceder a la información porque tienen dificultades de comprensión lectora. Estas dificultades pueden ser transitorias, como las personas que se incorporan de manera tardía a la lectura o las personas inmigrantes, o permanentes, como es el caso de las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo.

Para conseguir que la lectura sea un disfrute universal, se están desarrollando diferentes proyectos para fomentar la Lectura Fácil. Uno es el proyecto de los clubes de lectura financiados por el Instituto de Atención Social y Sociosanitaria que se realizan en el Centro Sociosanitario El Sabinal y en la Residencia de Taliarte.

Clubes de lectura en Lectura Fácil

En la Residencia de Taliarte, un centro para personas mayores, han desarrollado un proyecto de Lectura Fácil en colaboración con Plena Inclusión Canarias. La herramienta que se utiliza en el club es un libro en Lectura Fácil.

La Lectura Fácil es un sistema de escritura para que los textos se entiendan mucho mejor, utilizando frases cortas, palabras sencillas e ilustraciones o fotografías que apoyan la comprensión de la lectura.

Para ayudar a seguir la lectura y, de paso, enriquecerla se organizan otras dinámicas como, por ejemplo, definir palabras, buscar sinónimos, hacer preguntas relacionadas, compartir letras de canciones que tienen que ver con la historia del libro o visualizar vídeos relacionados con algún aspecto de la historia.

Objetivos del fomento de la Lectura

El club de lectura es una forma de tener un espacio de encuentro para conocer a otras personas. Además, los temas permiten a las personas usuarias de la residencia rememorar anécdotas, vivencias, y compartirlas con los demás. A través de las historias que se cuentan en los libros y las historias que comparten los propios participantes, se fomenta la socialización y el trabajo en grupo.

Uno de los objetivos de este proyecto es trabajar el área cognitiva para que la persona mantenga en el tiempo todas sus capacidades de lectura, escritura y comunicación oral. Aunque el objetivo más importante es favorecer un acceso universal a la lectura.

Con la incorporación de la lectura fácil en los centros de mayores, una actividad pionera en Canarias, se puede compartir el placer de la lectura con personas que tienen diferentes niveles cognitivos, haciendo la actividad más integradora e inclusiva. Y, además, se entrena la memoria y el desarrollo cognitivo de las personas participantes.

El teatro puede ser una terapia emocional

para todas las personas.

Es decir, gracias al teatro, todas las personas

podemos trabajar las emociones

y superar muchos problemas.

 

La actriz Blanca Rodríguez es la directora

del grupo de teatro Antígona.

Antígona es un grupo de teatro para personas aficionadas.

En este grupo, hay personas que están en la ONCE

y otras que tienen algunos problemas para ver.

 

Blanca Rodríguez

dice que las personas del grupo Antígona

son actores y actrices de calidad

y que son un ejemplo de superación.

 

Desde sus comienzos,

las personas del grupo se dieron cuenta de que el teatro

les ayudaba a entrenar la memoria,

a tener más confianza

y a tener más contacto con otras personas.

 

Sandra Pérez está en el grupo de teatro Antígona

desde 1999, año en el que entró en la ONCE.

Sandra cuenta que el teatro le ayudó

a superar la experiencia de quedarse ciega.

 

En el teatro para personas ciegas,

hay que seguir unas pautas.

Por ejemplo, es muy importante

reconocer el espacio

para saber la posición de los personajes

y de los muebles.

 

Eloísa Peña, actriz de este grupo de teatro,

dice que hacer la obra Afrodita

fue una gran experiencia y un gran reto

porque tuvieron que actuar, bailar y cantar.

 

Desde 1988, el grupo de teatro Antígona

ha participado en varios festivales internacionales.

 

Ahora, ellos ensayan con mucha ilusión

la obra El caso de la mujer asesinadita,

escrita por Miguel Mihura y Álvaro de Laiglesia.

Quieren estrenarla a principios del año que viene.

 

*Adaptación a Lectura Fácil y validación:

Servicio de Lectura Fácil Más Fácil

(Plena inclusión Canarias)

 

En la imagen, un momento del ensayo

de la obra.

David Hernández es capitán del equipo de baloncesto en silla de ruedas BSR ACE Gran Canaria. Hace 10 años tuvo un accidente laboral. Trabajaba en la construcción y “un día cualquiera”, tal y como él nos cuenta, se soltó una carga y se le cayó encima. Le rompió la columna a nivel dorsal 12, lumbar 1, y cambió su vida. Sin embargo, David encontró un motivo para luchar y seguir adelante: su primer hijo y el deporte.

 

Después del accidente, ¿qué te dio fuerzas para continuar con tu vida?

Lo primero que nos preguntamos es ¿por qué a mí? Pero después de haberlo pasado, sé que se pueden hacer muchas cosas. A mí el deporte me abrió un poco el mundo. En el mundo del baloncesto ves muchas personas con discapacidad así que no te preguntas tanto que por qué a ti, porque hay tantas personas que tienen discapacidad por un accidente, una enfermedad o por cualquier otra razón… Entonces das el siguiente paso de empezar a trabajar y a buscar alternativas no para solucionar tu problema, sino para saber llevarlo lo mejor posible.

 

 

¿Qué alternativas encontraste en este proceso de recuperación?

A mí me ayudó enterarme en el hospital de que mi pareja estaba embarazada. En ese momento tenía una sensación agridulce y pasé a tener una sensación muy hermosa. Estábamos buscando desde hacía años tener un hijo. Para mí fue un palo fuerte pensar cómo iba a hacer con mi hijo, pero la parte positiva era que tenía algo por lo que luchar; era una ilusión.

 

Tengo entendido que además tuviste la suerte de tener a alguien que te animó a introducirte en el ámbito deportivo

Sí. En mi familia son deportistas. Mi hermana fue olímpica en Balonmano. Me ayudó mucho en mi transición hacia el deporte. Iba al gimnasio con ella y hacíamos de todo: cintas, gatear… Ella me inculcó esa fuerza, ese empujón, para no quedarme en casa.

 

¿Qué es lo mejor y lo peor que te ha pasado como jugador profesional?

Aunque todo compensa, quizás lo peor es el tiempo que dejo de estar con mis hijos y mi pareja. Resulta que mi lesión se convirtió en incompleta y pude tener otro hijo. Lo mejor es lo que me aporta: dejar un poco la vida cotidiana, tener objetivos, tener responsabilidades… Además, practicar deportes en silla te ayuda a tener mucha autonomía en el día a día.

 

¿Qué consejo le darías a una persona que acaba de tener un accidente que le afecta a su movilidad y que no sabe muy bien hacia dónde enfocar su vida?

Eso depende de lo que quiera, no a todo el mundo le gusta el deporte. Hay personas a las que les gusta más estudiar y terminan su carrera. Pero es verdad que el deporte te ayuda en cualquier faceta de la vida porque te hace sentir bien. A los que vamos en silla de ruedas nos ayuda mucho en el manejo de la silla, a saber caerte, por ejemplo. Caerte no te preocupa tanto como antes y te sientes más autónomo. En definitiva, con ganas y con objetivos se pueden conseguir muchas cosas.

El Ayuntamiento de Agaete ha presentado el Plan Municipal de Accesibilidad de Agaete 2018, cuya redacción ha contado con una subvención de 17.000 euros procedentes del Instituto de Atención Social y Sociosanitaria (IAS) del Cabildo de Gran Canaria. El plan ofrece un diagnóstico de las necesidades que tiene el municipio en el ámbito de la accesibilidad.

 

La presentación contó con la presencia del alcalde del Ayuntamiento de Agaete, Juan Ramón Martín; la teniente alcalde y consejera insular, Inés Miranda; la concejala de Servicios Sociales, Hortensia Jiménez;  la concejala de Urbanismo, Candelaria Mendoza,  y la técnica de Gran Canaria Accesible del Instituto de Atención Social y Sociosanitaria del Cabildo de Gran Canaria, Olivia Guerra.

 

La concejala de Servicios Sociales, Hortensia Jiménez, explica que la apuesta por este plan es fundamental para tener una visión global de las necesidades de los vecinos y las vecinas” y poder así “erradicar las barreras del municipio” para que todas las personas que viven en Agaete y las personas que la visitan, “puedan disfrutar de un municipio humano y accesible”.

 

El plan recoge cuatro itinerarios de accesibilidad con actuaciones en zonas de especial tránsito: el centro de Salud, el Puerto de las Nieves, laurbanización El Turmán y la conexión del paseo marítimo con las piscinas naturales. También se proponen actuaciones en El Risco, El Valle y en el patio central de las Casas Consistoriales, en el que se colocará un ascensor que conectará ambos edificios y que dará servicio a los tres niveles con la inclusión de un itinerario adaptado en cada una de ellas.